Poner suelo radiante en casa te ofrece un sinfín de ventajas, desde el confort hasta el bajo consumo. Ya puedes decir adiós al frío invierno, a las mantas y a los sistemas de calefacción que consumen mucho y calientan poco.
¿Qué es el suelo radiante?
Por si no sabes lo que es un suelo radiante, te aclaramos que no es otra cosa que un sistema de calefacción, que se encuentra instalado bajo el suelo de la vivienda. Una de las principales ventajas de este tipo de suelos es que el calor se emite de manera homogénea. Este calor proviene de una red de tuberías que son instaladas bajo el suelo. Por ellas circula el agua caliente a una temperatura que ronda los 30º y 45º.
El suelo radiante no está aún muy extendido en España, en otros países europeos, sin embargo, llevan años usándolo. Y es que poner un suelo radiante frente a los métodos tradicionales de calefacción como radiadores o bombas de calor te dará muchas ventajas.
Ventajas de poner suelo radiante
Para solicitar presupuesto para la instalación de aerotermia debes conocer antes las principales ventajas del suelo radiante, de esta manera podrás conocer la mejor manera de calentar tu hogar.
Confort garantizado
El sistema de tuberías que componen este tipo de suelo lo que hace es calentar las masas de aire de abajo a arriba y de forma uniforme. Esto es ya de por sí una gran ventaja frente a los radiadores, puesto que éstos sólo calientan puntos concretos de la casa. Esta forma homogénea de repartir el calor da una sensación de confort mucho más duradera.
Por otra parte, que el calor se distribuya de abajo hacia arriba, hace que la temperatura sea algo superior en la zona de los pies. Por tanto, la sensación térmica es mucho más agradable, tener los pies calentitos en invierno no tiene precio.
El suelo radiante consume poco
Para que el suelo radiante funcione, el agua que circula por el circuito necesita alcanzar una temperatura de entre 30º y 45º. Este nivel de temperatura es bastante inferior a los 80º que necesitan otros sistemas de calefacción para funcionar adecuadamente. Debido principalmente a esto, poner suelo radiante en tu hogar te hará ahorrar más de un 20% en tu factura.
Alto rendimiento del suelo radiante
Además del bajo consumo señalado anteriormente, el diámetro de las tuberías por las que circula el agua es muy pequeño. Las tuberías del suelo radiante son como máximo de 10mm, por lo que tanto la cantidad de agua como la energía usada para calentarla es mínimo. Esto repercute en que el rendimiento en relación gasto de energía/resultados sea mucho mayor.
Mejor diseño
Al estar escondida en el suelo la instalación, ganaremos espacio en todas las estancias de nuestro hogar. Ya no habrá a la vista tuberías, radiadores o llaves de paso que estorben o afeen el entorno. Por lo tanto, a nivel estético es preferible a los sistemas habituales de calefacción como radiadores y bombas de calor. De hecho, sólo se necesita un armario para guardar todos los colectores de la vivienda. Estos son muy parecidos a un cuadro de luces, por lo que ocupan muy poco espacio.
El suelo radiante también puede ser refrigerante
El uso más extendido del suelo radiante es para calefacción, no obstante, también puede usarse la instalación para refrigerar. Si en vez de hacer circular agua caliente por las tuberías usamos agua fría, el efecto refrigerador será ideal para el verano.
Ahora ya conoces las principales ventajas de poner suelo radiante en tu hogar u oficina. No sólo estarás más confortable, sino que además ahorrarás considerablemente.